Sirenas
Cumbres dilatadas
de olas brincantes
fluyen sosegadas
a través de la brisa
con ecos arcanos
Ocultan en su palma
el canto de un hechizo
de veneno mortal
con resplandor de
mirada de plata
Susurros acuosos
emergen de ojos
de lágrimas de sal
que muerden con
colmillos lapislázulis
Bocas sangrientas
se abren a través
de los abismos de coral
manchadas de crimen
del deseo de pecado
Cabellos ondulados
flotando sobre el elixir
Morada de los delfines
que arrastra tu cuerpo difunto
hasta las arenas doradas
Hijas de las olas
maldición de marineros
musas de los infiernos
manzana de la tentación
de belleza sublime
Ellas te someten
a postrarte en su regazo
complacientes de su poder
y obligarte a libar
con bilis putrefacta
Resplandece su mirada
delirante carmesí
de lujuria envilecida
clavando sus colmillos
en tu cuello desnudo
Te embriagará de
licor lascivo que emana
de sus entrañas infectas
libando sobre la copa
de tus labios de nácar.
Te poseerán cada rincón
de tu ser inmaculado
devorándolo con ansiedad
cayendo en pecado impúdico
para despertar en éxtasis
Te cubrirán desvaneciendo
la esencia virginal
y encender la llama del
Reino Infernal que
pierde a los hijos de Dios
Has mordido la manzana
del Árbol del Paraíso
y su sabor jugoso
se mantiene en tus encías
para siempre jamás
Vivirás en pecado por
los cuatros rincones
del paraíso celestial
hambriento de sirenas
que danzan en las olas
