|
El Profeta
Es el amor el extraño
que permanece en la llama
de las ocultas retamas
que en nuestras vidas no hallamos
Fue un recuerdo sombrío
que caminó en las tinieblas
con huellas de ímpetu frío
que con tu espíritu quiebras
No eres más que sombras negras
con tu sabor de mandrágora
entre la hierva del ágora
por tu misterio de pena
porque vivimos en sueños
en falsedad que no giran
por no querer ver la vida
por un temor al engaño
solo libérate hermana
de la maldad del anhelo
que es ilusión depravada
vive la vida con fuego
muerde la tóxica seta
que despertó entendimiento
en la sulfúrea sangrienta
de emponzoñados sapos
es el saber el pecado
que mordió una manzana
en el abismo versado
donde ella repta callada
la libertad un pecado
que los perjuros cantaron
en las tinieblas del alba
hasta la muerte del alma
es la tribu la cadena
que te somete a la noche
rómpela en un grito abrupto
puño en llamas del delirio
vive con valor la vida
beberá solo los fuertes
el melancólico cáliz
de todo el conocimiento
Que así habló Zaratustra
en su gran cueva en el monte
junto a sus bestias vetustas
para hallar al superhombre
(Didac Coliman)
® Safecreative: 1212264247711
|
|
|
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminar